Factoring: una alternativa inteligente a las tarjetas de crédito para la financiación empresarial

Usar una tarjeta de crédito es una de las formas más comunes en que los emprendedores se financian; así es como los pequeños negocios se ponen en marcha.

Las tarjetas de crédito son prácticas y fáciles de obtener y usar. Por lo tanto, no es de sorprenderse que los propietarios de pequeñas empresas confíen en ellas para el pago de sus operaciones diarias.

<< Pero existe una mejor opción, una basada en una fuente de financiamiento que la mayoría de los dueños de negocios ni siquiera consideran: facturas sin pagar. >>

El factoring de facturas, también conocido como financiamiento de facturas o financiamiento de cuentas por cobrar, no es una opción de financiamiento ampliamente conocida, a pesar de que ha existido desde alrededor del siglo XVII. Este servicio le permite acceder a su capital atrapado en cuentas por cobrar en lugar de esperar 30, 60 ó 90 días para que su cliente le pague; esto le permite liberar facturas y pagar sus cuentas en efectivo.

<< En comparación con las tarifas de tarjetas de crédito, los costos de factoring son mucho más bajos. >>

Existen otras ventajas al usar factoring en lugar de una tarjeta de crédito. Por un lado, con el factoring, esencialmente, estás obteniendo acceso a los fondos que ya has ganado y no estás incurriendo en más deuda. El endeudamiento es una de las mayores desventajas al hacer uso de una tarjeta de crédito. Si no tiene cuidado, su negocio podría terminar con una gran cantidad de deudas. Recuerde que el crédito personal es frágil.

Por otra parte, hay ciertas necesidades comerciales que simplemente no se pueden cubrir con una tarjeta de crédito, un ejemplo de ello es la nómina de la empresa.

El factoring le ofrece una solución más inteligente y más conveniente para sus necesidades diarias de financiación de negocios.